MARIANA
Rocio y yo nos levantamos temprano para ir a
recorrer el campus. Mientras íbamos caminando seguíamos hablando para ir
conociéndonos mejor, aunque ayer ya hablamos bastante y puedo asegurar que
llegaremos a ser grandes amigas. Rocio es rubia y de ojos verdes, tiene un buen
físico, sin duda alguna es popular entre los chicos, pero lo que me interesa a
mi es que parece una gran persona. Por lo poco que la he podido conocer, me he
dado cuenta de que es muy alegre y divertida, además de que también parece
inteligente.
De pronto, sentí que Rocio ya no venía conmigo y me di
la vuelta. Entonces la vi quieta mirando algo. Me acerqué a ella y le pregunté
-¿Qué miras Rocio?
-¿No es el chico más guapo que has visto en tu
vida?- me dijo con mirada soñadora. Creo que acabo de descubrir algo sobre mi
nueva amiga... es muy enamoradisa
-¿Qué chico?
-Aquel, el de la moto negra
Miré y en efecto el chico era muy guapo, tenía el
pelo rubio, su cara era cuadrada y tenía un cuerpazo de infarto, sin embargo...
hay algo que no me termina de gustar sobre él, parece el típico mujeriego, no
me gustaría que lastimara a mi amiga.
-Eeee... Rocio, ¿te parece si seguimos?- le pregunté
queriendome ir de allí lo más rápido posible
-¡Eee? ¡No! ¿por qué? Yo quiero conocerlo, hablar
con él... ¿Y si es el amor de mi vida y por culpa de que tú quieres irte no lo
llego a conocer nunca?
-Si es el amor de tu vida lo volverás a encontrar,
ahora vámonos por favor
-No Mar, porfis vamos a hablar con él, ¿si?- me
pidió poniendo ojitos de cachorrito, sin embargo, el diminutivo con el que me
habló por segunda vez hizo que me saltaran las lágrimas y en esta ocasión Rocio se dio cuenta- Mariana, ¿qué pasa? ¿Qué dije? ¿Estás bien?
-Es... estoy bien, es solo... ¿puedes no volver a
llamarme Mar, por favor? Me trae muy malos recuerdos- dije mirando al suelo
-¿Malos recuerdos?- asentí- ¿Quieres contarme?
-Por ahora no, más adelante tal vez
-Bueno, está bien... cuando estés lista me cuentas,
por lo pronto no volveré a llamarte así. Ahora... vamos a hablar con el amor de
mi vida- me dijo antes de dirigirse al chico de la moto
Al verla alejarse suspiré y decidí seguirla
-¡Hola!- lo saludó Rocio cuando llegamos a donde él
estaba
-Hola- contestó con una voz grave
-Yo soy Rocio y ella es mi amiga Mariana- nos
presentó a ambas- Estábamos dando una vuelta por el campus cuando vimos tu moto
y... ¡me encantan las motos! Y la tuya es preciosa, así que decidí acercarme
para preguntarte qué marca es porque la verdad me gustaría comprarme una moto
igual
Él sonrió mientras miraba a Rocio, se nota que ella
le gustó
-Bueno Rocio, me alegra que te guste mi moto... Por
cierto, soy Nicolas, encantado de conocerlas chicas
-El gusto es nuestro, ¿verdad Mariana?
-Si, claro.
-Y dime Mariana, ¿a ti también te gusta mi moto?
-Um... No mucho, lo siento pero soy más de autos- él
rió justo cuando sonaba su móvil
-¿Hola?- lo atendió. Se alejó un poco para hablar
con más privacidad y Rocio aprovechó para hacerme señas de victoria, dándome a
entender que se había dado cuenta de que él se había fijado también en ella-
Vale, te espero- colgó- Lo siento chicas, era mi amigo. Viene hacia aquí...
¿por qué no os quedáis y vamos a comer juntos los cuatro?- preguntó mirando a
Rocio
-Nos encantaría- contestó ella sin darme tiempo a
responder
-Yo creo que mejor paso- eso hizo que Rocio se
girara hacia mi
-¿Qué? ¡No! No puedes pasar, ven por favor- me miró
suplicante
-Está bieeen- suspiré rendida
-Genial- dijo Nicolassonriendo- Estoy seguro de que
a Peter le encantarás Mariana
Peter, el nombre del amigo de Nicolas es Peter... Ese
nombre me trajo tantos recuerdos... y todos malos, pero... seguro que no es el
mismo Peter que me hizo tanto daño
PETER
Llegué al campus y no veía nada interesante, así que
para distraerme llamé a mi mejor amigo para preguntarle donde estaba y pasar el
rato con él. Me contestó que estaba en el aparcamiento de su residencia con dos
chicas que acababa de conocer y que por lo visto estaban buenísimas, así que
sin pensármelo dos veces le dije que iba para allá a conocer a esas dulzuras y
que tratara de convencerlas de ir a comer con nosotros.
Cuando llegué a la residencia de Nico me bajé de
mi auto y lo busqué con la mirada y... la verdad, lo encontré bastante bien
acompañado. Las chicas estaban bastante bien. Una de las chicas era rubia con
el pelo liso, tenía un cuerpazo increíble y piernas kilométricas, trae puesto
un vestido azul que le llega un poco por encima de las rodillas y le sienta a
la perfección. He de decir que mi debilidad son las chicas rubias, pero en este
caso ella no me causaba ningún interés, en cambio la otra chica... Ella tiene
el pelo chocolate, sus piernas, perfectamente tonificadas, me hacían
imaginar como se verían rodeando mi cintura mientras le hago el amor y su
cuerpo... Dios, su cuerpo... enfundado en un vestido de color blanco que
contrasta perfectamente con el tono bronceado de su piel haciendola lucir
hermosa y preguntándote qué hay debajo de él, es el cuerpo por el cual
cualquier hombre haría cualquier cosa. Me puse duro solo de verla
Decidí dejar de observar desde lejos y acercarme a
ellos para conocer el nombre de la próxima chica que llevaría a mi cama, la
pelinegra más hermosa que alguna vez haya visto en mi vida.
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Bueno, como ya dije en la entrada anterior, capitulo dedicado a Rita, espero que disfruten el capitulo... comenten para dejarme saber sus opiniones
PD: parece que el siguiente capitulo se viene fuerte no? ;)
Gran confianza tiene Peter en los gustos d su amigo x las chicas,ya k d una le dijo k las invitara a comer.
ResponderEliminarTengo una mordaza en la boca,jajajaja.
massssssssssssss
ResponderEliminaruuuuhhhhhh...
ResponderEliminarmaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas....
Angy =D
Pero como que le van las rubias???. . .y ésa morocha que dejó muy dañada??? Se va a tragar sus palabras en cuanto la vea. Ya tengo ganas de saber que es lo que pasó con ellos en el pasado. . .
ResponderEliminarFati cariño muchas gracias por dedicarme el capitulo, un besito
Me encanto el capítulo y espero lo que se viene
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