Del odio al amor... ¿un solo paso?: Capítulo 5

MARIANA

Han pasado varios días después de mi encuentro con Peter y su amigo no ha parado de intentar localizar a Rocío, pero ella ha rechazado todas sus llamadas porque dice que es mi amiga y no puede mezclarse con el enemigo (que sería Peter y por extensión, también sería Nicolás). Yo le he dicho que si quiere puede salir con Nicolás pero la verdad me alegra que no quiera hacerlo porque eso significaría que Peter y yo estaríamos obligados a encontrarnos muchas veces.

En este momento estoy dirigiéndome a mi primera clase en la facultad. Voy tan concentrada en mis pensamientos que no me doy cuenta de que me voy a tropezar hasta que ya estoy tirada en el suelo. Levanto la cabeza para ver con qué o más bien con quién me tropecé y no puedo creer lo que ven mis ojos...

PETER

Estoy esperando a Nico para ir juntos a nuestra primera clase ya que estamos en la misma, cuando siento que alguien se tropieza conmigo. Miro al suelo para ver a esa persona y cuando levanta la cabeza no puedo creer mi suerte. Se trata de Mariana, la chica que conocí hace unos días y que, junto con su amiga Rocío, desapareció sin dejar rastro. Al verla no puedo evitar sonreír; tenía muchas ganas de volver a verla, y es que no he dejado de pensar en ella ni un maldito minuto desde que la vi por primera vez.

-Vaya vaya... ¿pero a quién tenemos aquí?- le digo mientras le ofrezco mi mano para ayudarla a levantarse- Hola preciosa, ¿te acuerdas de mi?- esto último lo digo con voz seductora

-Si...- me contesta ella algo vacilante mientras acepta mi mano. Cuando nuestras manos se tocan, siento un escalofrío y tengo una sensación extraña, como si de un déjà vu se tratara- Si me disculpas, tengo que irme- dice soltándose de mi mano

Ella hace amago de irse pero la detengo cogiéndola del brazo

-¿Por qué tanta prisa?

-Tengo clase, así que... Suéltame

-Ey, ¿por qué tan arisca? ¿Hicimos mi amigo o yo algo mal? ¿Las ofendimos a ti o a Rocío? Porque hemos tratado de localizarlas desde el otro día, pero no ha habido forma, Rocío no contestaba su teléfono y el tuyo no lo teníamos

MARIANA

Por Dios, ¿y ahora qué le digo? No puedo decirle la verdad, por lo visto él no me reconoció y, sinceramente, así prefiero que siga todo. Pero algo tengo que decirle, no es normal que desapareciéramos de esa forma...

-Aaaa... Lo que pasa es que... mmm- intentaba buscar una excusa que sonara creíble y entonces se me ocurrió- Rocío perdió el móvil. Se le debió de caer al suelo o dejarlo en algún sitio porque no lo encuentra desde el día que los conocimos.

-Vaya, que mala suerte- me dijo mientras me miraba intensamente- Pero parece que el destino si quería que nosotros siguieramos en contacto, ¿no? Digo, aquí estamos, tu y yo...- lo último lo dice en un susurro bajo y ronco mientras se acerca a mi y... espera, ¿qué? Se está acercando, alerta, SE ESTÁ ACERCANDO. Automáticamente doy un paso atrás, no lo quería tener demasiado cerca. Él frunce el seño, pero sigue hablando como si nada hubiera pasado al ver que yo no digo nada- Bueno, ¿qué te parece si le hacemos caso al destino y vamos a cenar esta noche? Tú y yo preciosa

Me ha invitado a salir... Dios, esto va a ser más difícil de lo que pensé... Claro, que nunca pensé que me encontraría en esta situación...

-Creo que voy a pasar, gracias.

-¿Cómo?- me pregunta con la mandíbula apretada... vaya, parece que no está acostumbrado a que lo rechacen y no me extraña... Me hizo mucho daño, pero debo reconocer que es guapísimo y tiene un cuerpo de infarto.

-Dije que no

-¿Por qué?- me pregunta claramente enojado

-Porque se nota que eres de esos típicos chicos que solo salen con una chica hasta que consiguen acostarse con ella y una vez conseguido, si te he visto no me acuerdo... Gracias, pero ya tuve suficiente de chicos idiotas y mujeriegos en mi vida.

Cuando termino de hablar, me voy, dejando a un boquiabierto y sorprendido Peter por mis palabras atrás. Palabras que, si bien en su mayoría eran sinceras, no eran del todo ciertas. Si, no me gustaban demasiado los chicos mujeriegos como Peter, esos que tras llevarte a la cama se olvidan de ti sin importarles ni tu nombre, pero la verdadera razón por la que no quería salir con él es por lo que me hizo, la apuesta. Eso es algo que nunca le voy a perdonar.  

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Holaaaa!!!! Disculpen la demora, estoy estudiando para los exámenes de recuperación y mi tiempo es un pelín limitado... tenedme paciencia plis! 

PD: hoy subo solo también Del odio al amor... ¿un solo paso? Porque como ya les dije, no tengo mucho tiempo y como esta novela tiene más éxito que la otra pues... acá está el capítulo :)

RITA: obvio que va a haber venganza jaja y desde mi punto de vista es bastante cruel... no sabía que yo podía ser tan cruel pero lo bueno es que solo lo soy cuando escribo porque sería incapaz de hacer algo así en la vida real... ya entenderás por qué digo eso ;) Besoooos

ANGY: siiiii!! venganza, dulce venganza... y no por el hecho de que no la reconociera, sino por lo que le hizo... ya veremos cómo se da todo ;) Besooooos

ANÓNIMO: ya subí jajaj Besoooos